La antigua laguna del Cañizar fue un extenso humedal de agua dulce situado en el fondo de la fosa tectónica del Jiloca[1][2] junto a la localidad de Villarquemado.
Estas actuaciones, dirigidas por el ingeniero militar italiano Domingo Ferrari, supusieron la total desaparición de la laguna.
[6] Con el paso del tiempo, el drenaje principal, conocido como Acequia Madre, pasó a considerarse como un tramo más del río Jiloca y la existencia del Cañizar se fue olvidando.
[7] A finales del siglo XX la práctica totalidad de su lecho había sido roturado para su uso agrícola.
Actualmente, ya se han recuperado 380 ha de zonas inundables lo que sitúa al nuevo Cañizar como la laguna de agua dulce más extensa del interior de España[9].