Labios (genitales)

En el aparato reproductor femenino, los labios (del latín, labia) son pliegues salientes que bordean la vulva y forman parte de las estructuras del aparato genital externo de la hembra humana.Dentro del vestíbulo se encuentran las aberturas o salidas de la vagina y la uretra.No obstante, durante la diferenciación sexual del feto, los pliegues labioescrotales de los varones normalmente se fusionan longitudinalmente en el centro, formando un saco para que las gónadas masculinas (testículos) desciendan a él desde la pelvis, mientras que en las hembras estos pliegues normalmente no se fusionan, formando los dos labios mayores y la hendidura pudenda entre ellos.La cresta o surco que queda de la fusión puede generalmente observarse en el escroto.Los labios menores, también llamados ninfas, son dos colgajos de piel que se extienden hacia fuera desde los orificios vaginal y uretral hasta abarcar el vestíbulo.Se extienden desde el capuchón del clítoris, formando un prepucio, hasta rodear el orificio de la uretra, la vagina y terminar en la llamada horquilla perineal, a pocos centímetros del ano.En algunas mujeres, los labios menores están prácticamente ausentes, mientras que en otras pueden ser carnosas y protuberantes.[7]​[4]​ Durante la estimulación sexual, los labios se llenan de sangre, típicamente hinchándose y oscureciéndose o bien enrojeciéndose.En muchas culturas y lugares de todo el mundo, los labios mayores y menores, como parte de los genitales, se consideran partes privadas o íntimas, cuya exposición (especialmente en público) está regida por costumbres socioculturales bastante estrictas.En muchos casos, su exposición en público está limitada y, a menudo, prohibida por la ley.[8]​[9]​ El uso del adjetivo pudendo para referirse a los labios y otras partes de los genitales enfatiza esto, siendo definido por la Real Academia de la Lengua como «Torpe, feo, que debe causar vergüenza».Esto puede repercutir negativamente en la vida de una mujer, ya que la vergüenza por el aspecto genital hace que les sea más difícil disfrutar de la actividad sexual, acudir al ginecólogo o realizarse un autoexamen genital.
Vista de una vulva:
La mujer en posición de pie, los labios menores parcialmente cubiertos.
La exposición de los labios menores mediante la difusión de los labios mayores
Labios genitales con vello púbico
Labios genitales sin vello púbico
Labios mayores grandes