Esta película, conocida en español como Lo viejo y lo nuevo (Старое и новое, Stároe i nóvoe), narra cómo los adelantos técnicos cambian la vida de una comunidad a principio del siglo XX.
"La línea general" era el proyecto que Serguéi M. Eisenstein iba a rodar tras “El acorazado Potemkin”, con la colaboración de Grigori Aleksándrov con quien Eisenstein ya había trabajado en “La huelga” y “El acorazado Potemkin”.
El título de la película hacía referencia a la ‘línea general’ del Partido en los temas referentes al desarrollo rural, siguiendo las premisas de la Nueva Política Económica.
Al retomar el proyecto de La línea general en 1928, debido a los cambios en la política agraria, Eisenstein tuvo que incluir nuevas escenas, traicionando así el espíritu original de su historia y censurar el individualismo de los campesinos independientes.
El propio Eisenstein la consideraba un experimento en ‘éxtasis cinematográfico’ y que perfectamente podría ser un ejemplo de ‘montaje orgásmico’.