Violette se ha enamorado del capitán Étienne Relais y ha prometido dejar la prostitución y casarse con él en cuanto tengan suficiente dinero para irse a Francia; en cuanto a Valmorain, se ha prometido en Cuba con una muchacha española llamada Eugenia García del Solar, quien proviene de una familia empobrecida pero de antiguo linaje.
Ella consigue a una niña, Zarité, para que sea la doncella y esclava personal de Eugenia.
No es hasta años después que da a luz a un niño vivo, aunque débil, con la ayuda del doctor Parmentier y de Tante Rose, la curandera de la plantación.
En los años siguientes, Zarité será la encargada de cuidar al pequeño, llamado Maurice, y entre ellos se establece una auténtica relación madre-hijo.
Valmorain lo entrega a Violette y Relais, que se han casado y, tras criarlo durante unos años como hijo suyo, lo adoptan bajo el nombre de Jean Martin Relais.
Poco después de que Gambo se una a los esclavos rebeldes, estos inician una revolución liderada por Toussaint Louverture.
Cuando Zarité descubre una conspiración contra el gobierno republicano de Saint-Domingue, avisa a Zacharie.
Allí, Valmorain pone en marcha una nueva plantación, pero esta vez se propone que en ella los esclavos puedan llevar una existencia humana, al menos en comparación con las difíciles vidas de los esclavos en su antigua hacienda.
Allí el joven se vuelve abolicionista y empieza a luchar por la emancipación de los esclavos.
Así pues, se proyecta el baile del Cordon Bleu para que Rosette y otras muchachas sean placées.
También Rosette está embarazada, pero un incidente racial protagonizado por Hortense termina en una pelea.