La diagonal del loco

[1]​ El encuentro por el título mundial de ajedrez se desarrolla en Ginebra entre dos grandes maestros, el aspirante, el joven virtuoso Pavius Fromm, húngaro exiliado, y el campeón mundial, Akiva Liebskind, soviético y judío.

Lo interesante de esta película, es que el propio ajedrez se convierte en una especie de parábola alegórica sobre la Guerra Fría (1950-1989)años ochenta.

La traducción del título es equívoca, pues la palabra fou en francés, además de loco significa alfil, lo que dado la temática de esta película resulta bastante coherente.

Se trata de dos contendientes, rivales en el arte de los tableros a cuadros, y pertenecientes a la cultura de lo que una vez se llamó el telón de acero, Liebskind es leal al régimen comunista de la Unión Soviética, es un veterano jugador y héroe ajedrecístico de la URSS que está obligado a derrotar a su oponente, en tanto que Fromm es un destacado jugador joven y, sobre todo, un convencido disidente que vive en el exilio.

[2]​ Ese mismo año hubo una fuerte polémica acerca de los criterios de la Academia para seleccionar las películas candidatas a esta categoría y para elegir la ganadora, ya que, entre otros incidentes cuestionables, la película Ran, del japonés Akira Kurosawa, quedó fuera de competencia en beneficio de otras producciones abiertamente menores.