La Guerra Sagrada

En ese momento, todos los oficiales y soldados del desfile prestarán atención a la bandera.

La letra fue escrita por Vasili Lébedev-Kumach durante los primeros días de la invasión a la Unión Soviética por el ejército alemán.

El cántico fue rápidamente aceptado entre las tropas; sin embargo, sólo se transmitió por radio el 15 de octubre del mismo año, después de derrotas colosales en la guerra, porque las autoridades pensaban que la letra era sombría y trágica, pero a partir de esa fecha se emitió diariamente por la Radio Soviética.

La melodía suena como toque de rebato y llama a la Guerra Sagrada de la nación entera contra sus invasores con un marcado sesgo ideológico anti fascista y anti nazi.

Inmediatamente Aleksandr Aleksándrov compuso la música para aquella letra dando luz a la pieza que luego tendría tanta trascendencia.

Según afirma Víktor Suvórov, exmilitar soviético desertor, convertido en escritor de temas históricos, en su libro Rompehielos.

Día "M" fue escrita por una orden que dio Stalin en febrero de 1941.

Según testigos presenciales, ese día la canción recién estrenada se interpretó cinco veces seguidas[2]​ En mayo de 2005, en memoria de este hecho, se erigió una placa conmemorativa en ese lugar.

Aunque la pieza fue muy bien por acogida por la ciudadanía, no tuvo una amplia difusión oficial hasta el 15 de octubre de 1941 ya que las autoridades creían que tenía un sentido demasiado trágico ya que no cantaba sobre una victoria rápida "con poca sangre", sino sobre una pesada batalla mortal.

La canción ganó gran popularidad en todos los frentes de la Gran Guerra Patria y mantuvo una alta moral entre las tropas, especialmente en las duras batallas defensivas que se dieron en diferentes lugares como la batalla de Stalingrado y la batalla de Leningrado.

En el período de posguerra, fue un tema habitual en las interpretaciones del Coro del Ejército Rojo, siempre con gran éxito tanto en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) como en sus giras por otros países.

I. Lébedev-Kumach, con sus numerosas ediciones que reflejan el trabajo constante en la creación del texto[6]​ Sin embargo, el doctor en historia del arte E. M. Levashev defiende la autoría de A.

A. Bode, expresando dudas sobre la imparcialidad y validez de la decisión del tribunal.

Este último paralelismo ya lo notó el famoso musicólogo soviético A.

Дадим отпóр душителям Всех плáменных идéй, Насильникам, грабителям, Мучителям людéй!

Гнилой фашистской нéчисти Загóним пулю в лоб, Отрéбью человéчества Сколóтим крéпкий гроб!

Dadim atpor dushíteliam vsiej plámennyj yiyéi, Nasíl'nikam, grabíteliam, muchítieliam liudéi!

Gnilóy fashístskay niéchisti Zagónim púliu v lob, atreb'iu chelovéchestva skalótim kriépkiy grob!