El nombre de "La Campa" tiene su origen en una expresión que utilizaban los primitivos cuando laboraban en minas, quienes al observar que iba a llover o caía la tarde, se invitaban diciendo: !Vamos a "acampar"!
Debido a su altura sobre el nivel del mar, no ayuda para el cultivo y producción de la planta de café, además la geografía cercana tiene sabanas que permiten la agricultura.
Los hermosos y originales tallados en barro son un centro de especial atracción al turista.
La cabecera cuenta con energía eléctrica y progresivamente se electrifican las aldeas vecinas.
También cuenta con servicios de telecomunicación móvil, también opera un pequeño hotel para visitantes y turistas.