El ayudante de Razumovski en este viaje a Alemania fue Grigori Teplov.
Teplov ejercía influencia sobre la Pequeña Rusia en su calidad como secretario y consejero de Kiril Razumovski (con cuya prima se casó).
Durante su servicio como Hetmán, Baturin fue restablecida como residencia del Hetmán y Razumovski tuvo opulentos palacios barrocos erigidos tanto en Baturin como en Glukhov por el arquitecto imperial Andréi Kvásov y Charles Cameron.
Kiril tuvo cinco hijos, entre los cuales el Conde Alekséi Kirílovich Razumovski (1748-1822) fue Ministro de Educación entre 1810-16, el Príncipe Andréi Razumovski (1752-1836) fue el embajador plenipotenciario ruso en Viena en los años del Congreso 1814-1815.
Todos los descendientes en línea masculina de Kiril Razumovski provienen por primogenitura de su cuarto hijo Grigori Razumovski (1759-1837), quien tuvo que emigrar a Europa Occidental y adquirió relativa fama como científico naturalista y miembro de varias sociedades científicas distinguidas en Austria, Prusia y Suiza.