El episodio fue escrito por Jeff Westbrook y dirigido por Bob Anderson.
Marge y los niños deciden levantarse e irse en lugar de seguir viendo la televisión, pero Homer se queda discutiendo con el monstruo y pidiéndole que devuelva el espíritu navideño.
Marge, viendo lo débil que se veía Gil, lo deja quedarse en la casa.
Gil comienza a arruinar las vacaciones de los Simpson, pero, sin embargo, Marge continuaba permitiéndole que se quede en la casa.
Después de once meses, Marge decide decirle a Gil que no se puede quedar en su casa.
Marge queda horrorizada al ver que todo había sido culpa suya.