Juglans boliviana

Es un árbol caducifolio que llega hasta 25 m de altura formando una copa ancha y abierta.

El nogal boliviano se cultiva como ornamental e industrialmente por la calidad de su madera: densa, dura y fuerte, empleándose en ebanistería.

Este nogal produce una sustancia tóxica o alelopática para otras plantas, llamada juglona que interfiere su desarrollo normal, causando el amarilleamiento y marchitamiento del follaje (como el tomate).

El extracto concentrado de su cáscara se usa como desparasitante en medicina biológica.

Esta especie se encuentra amenazada por pérdida de hábitat[1]​[2]​ Juglans boliviana fue descrita por (C.DC.)