En muchos casos, esto puede dar a conocer problemas con la IA, cuando todos los jugadores emplean estrategias similares.
También se utilizan videojuegos enteramente controlados por el ordenador para exponer los gráficos o la jugabilidad, especialmente en los juegos de arcade.
La programación genética se puede utilizar para desarrollar estrategias más o menos exitosas contra otros jugadores mediante la selección natural.
Esta simulación no tiene por qué tener lugar en un ordenador, pero es un caso común en problemas complejos con muchas iteraciones y estrategias.
Se suelen incluir en esta categoría los mundos complejos simulados, como los videojuegos Creatures y Sim Earth cuando no hay intervención humana.