Juan de Naveda

[7]​ Se destacó por su estilo clasicista,[8]​ dentro de la tónica renacentista castellana.

De 1619 a 1638 va aumentando paulatinamente la decoración y cambia el orden dórico por el corintio.

Los tratados que sigue entonces son los de Jacopo Vignola y Labacco.

[9]​ Su obra es extensa, abarcó la arquitectura religiosa, la educacional, la pública, la militar, la asistencial, la civil privada y las obras públicas, incluyendo puentes y puertos.

[7]​ Había proyectado, además, un fuerte para El Sardinero, en la misma ciudad.