Es el cabecilla de toda la trama del caso Malaya de la que fue condenado en firme.
Además ha sido condenado en firme por los casos Saqueo 1, Minutas, Belmonsa, Urquía y el ya mencionado Malaya.
A través de su testaferro Montserrat Corulla, controlaba el dinero que producían los impuestos municipales de Marbella y lo invertía en coches de lujo, propiedades inmobiliarias de lujo en Madrid y varios caprichos en obras de arte altamente valiosas.
[1] Fue imputado por malversación, blanqueo de capitales y cohecho.
[2] En febrero de 2019 se le concede el tercer grado y sale de prisión.