[1] La crítica le ha considerado el "miembro proletario" del grupo de cineastas que en los sesenta revolucionaron el cine español.
A principios de los 50 logró salir del gueto y se formó profesionalmente con el director Enrique Gómez y el productor Ignacio Farrés Iquino dentro del cine negro de la época.
A ella pertenecieron, entre otros, los directores Joaquim Jordà, Jacinto Esteva y Pere Portabella.
[2] En su última película, Res publica (2009) mantuvo el mismo espíritu de experimentación que recorrió toda su trayectoria.
Desclasado, entrañable bebedor y gran conversador, nunca se dejó llevar por lo convencional ni por la vanidad, ni siquiera cuando el primer ministro portugués reconoció su labor cultural imponiéndole una medalla poco antes de su muerte», escribe en su crónica de la exposición Pepe Ribas, mientras recuerda que ya en 1983 Nunes, amigo de anarquistas como Abel Paz, Luis Andrés Edo o el abogado Mateo Seguí, proclamó que la indignación era la única solución.