Concluidos sus estudios se graduó en artes en la Universidad de Valencia y dio clases de filosofía entre 1644 y 1649.
Predicó en Valencia, Madrid, Sevilla, Granada y otras localidades.
Durante su estancia en Valencia mejoró el convento, amplió su biblioteca y sufrago la construcción de varias casas de socorro y beneficencia, así como el convento y santuario del Puig.
Más tarde, en 1679, ocupó el arzobispado de Tarragona nombrado por Carlos II.
Allí falleció en 1694 y fue enterrado en el coro de la catedral tarraconense, bajo una lápida adornada con su escudo heráldico.