Nacido en Mieres, con cinco años se trasladó con su familia a la provincia de Barcelona.
A principios de los 90 en Nueva York, Andrés trabajó en restaurantes como Paradis Barcelona, El Dorado Petit y El Cid, todos ellos cerrados unos años después.
José Andrés y los hermanos Adrià abrieron en Nueva York un espacio dedicado a la cocina española, un food hall de 3200 metros cuadrados.
Sin embargo, el chef fue denunciado por una trabajadora al no retribuir las horas extra estipuladas por la ley.
[8] Pertenece a una lista donde están las cien personas más influyentes del mundo según la revista Time, que lo define como «un icono culinario, conocido por su labor innovadora y refinada».
[15] En 2015 el Gobierno de España le concedió la Medalla al Mérito Turístico a la Internacionalización.
[20] Posteriormente anunció la donación del dinero recibido con este galardón (50 000 €) por duplicado a los afectados por la erupción de Cumbre Vieja en La Palma.