José Ferrarini (Zelbio, Como, Lombardía, Italia, 1886 - Buenos Aires, Argentina, 1975) fue un inmigrante italiano, que habiendo llegado muy joven con alguna experiencia en el ramo de la metalurgia, logró en un relativamente corto período de años convertirse en un importante empresario metalúrgico, hotelero e inmobiliario en Argentina.
En 1909 se casó con Teresa Morini, madre de sus tres hijos: Rodolfo Salvador, Catalina Teodolinda y Gerardo José.
Trayendo de Italia alguna experiencia adquirida en la fabricación de tela metálica, comenzó a trabajar como simple operario en una fábrica metalúrgica, siendo pronto ascendido a capataz, hasta lograr independizarse cuando la empresa en que trabajaba, que le debía varios meses de salario, le brindó un telar para compensar su deuda, con el cual montó un pequeño taller propio, incluyendo en él una máquina para hacer clavos.
Comenzó comprando el Hotel Ferrari, en La Falda, agrandándolo hasta alcanzar las 170 habitaciones, salones de juego, piletas, etc., vendiéndolo en 1947 al Gral.
Al Club La Falda, donó chapas, postes y tirantes para techar las dos canchas que tenía, para protegerlas de las inclemencias del tiempo.
Su generosidad alcanzó también su pueblo natal, Zelbio, en Lombardía, Italia, adonde hizo restaurar la vieja iglesia parroquial de la Conversione di San Paolo.