En 1914 alcanzó el grado de profesor y el diploma en pintura.
Durante la Primera Guerra Mundial sirvió en la infantería.
Destacó con sus trabajos tipográficos y durante la exposición de 1923 realizó cuatro relieves murales para el vestíbulo del edificio principal.
En la Bauhaus era muy apreciado por todos, por sus cualidades humanas y por sus dotes pedagógicas.
Al partir Herbert Bayer en 1928 se hizo cargo también de la imprenta (tipografía y gráfica publicitaria); antes ya había enseñado diseño de caracteres tipográficos.