Nacido de padres desconocidos, Jonás es entregado al Cónclave de muy pequeño para convertirse en un funcionario, Observador para el Sínodo.
Se educa en a ciudad de Focaris, y con el tiempo se transforma en Observador: un cargo jerárquico muy importante en el mundo ficticio de Fábulas invernales.
Tiene diversas asignaciones bajo ese cargo, y finalmente, en el rito en el cual debe presentar un tributo al pentácrata, falla y es exiliado a la Isla de Bellamar, un poblado de pescadores gobernado por el Nosotros.
Allí, Jonás relata sus historias a los pescadores, y se entera de que ha sido elegido para entrar a la Montaña Arbórea y enfrentar al Pentácrata.
Para esto, se somete al Carnífice, y se transforma en el Publicano, el recolector y redentor de almas, y se interna en la morada del pentácrata, quien le cuenta su historia.