Se ponen a hervir puerro, ajo, jengibre, cheongju (vino de arroz) y agua.
Se añaden las manitas de cerdo y se cuecen a fuego lento hasta que están blandas.
Entonces se sirve con una salsa de gamba fermentada llamada saeujeot (새우젓).
Como la preparación del jokbal es bastante trabajosa y exige mucho tiempo, suele pedirse a domicilio o comprarse en tiendas ya preparado.
Debido a su sabor fuerte y alto contenido graso, se come otras carnes a la parrilla coreanas: envuelto en lechuga o con otras verduras disponibles.