Parte de su vida tuvo lugar en Australia, en donde fracasó en utilizar la conducción eléctrica y explosiones aéreas para lograr lluvia artificial.
Realizó sus primeros estudios en el King College School,[1] en donde fue alumno de John Thomas Cooper y donde despertó su vocación por la ciencia.
[2] El efecto fantasma de Pepper fue muy aclamado por el público en general y admirado por sus colegas científicos, al punto que el público visitaba el teatro repetidas veces invadido por su curiosidad, intentando descifrar el incomprensible método del científico.
Inclusive el reconocido físico Michael Faraday solicitó una explicación sobre aquel hecho, al darse por vencido luego de pretender descubrir la técnica utilizada por Pepper.
Esta transmisión significó un importante avance para la ciencia, que conseguía mejorar las comunicaciones a larga distancia de manera efectiva.
[6] Cuatro días después de desembarcar en Melbourne, Pepper dio su primera clase como profesor universitario en el país, y un mes después viajaría a Sídney a fin de encontrar una mayor audiencia para sus demostraciones.
Por ese motivo, realizó intentos de guionar, actuar y ser director de un drama romántico mal recibido por los espectadores, llamado Hermes and the Alchymist (Hermes y el alquimista).
Durante los dos años posteriores a su llegada Pepper realizó numerosas giras por Australia, visitando Nueva Gales del Sur, Victoria y Australia meridional, para luego asentarse en Ashgroove, Queensland, en donde se desempeñó como analista público.
Pepper consideró que una solución científica a aquel hecho era factible, por lo cual intentó lograr el hito de la lluvia artificial.
Pepper consideró que estos efectos provocarían una suerte de lluvia artificial.
[2] El Hipódromo Eagle Farm fue visitado por 700 personas que sentían curiosidad por el experimento de Pepper.