John C. Breckinridge

Después de que la redistribución en 1854 hizo poco probable su reelección, se negó a postularse para otro mandato.

Los demócratas ganaron las elecciones, pero Breckinridge tuvo poca influencia con Buchanan y, como presidente del Senado, no pudo expresar sus opiniones en los debates.

Un tercero, el Partido de la Unión Constitucional, nominó a John C. Bell.

Tomando su asiento en el Senado, Breckinridge instó a un compromiso para preservar la Unión.

Los unionistas tenían el control de la legislatura estatal y obtuvieron más apoyo cuando las fuerzas confederadas se movilizaron a Kentucky.

Luego escapó del país y vivió en el extranjero por más de tres años.

Luego continuó sus estudios en el College of New Jersey (actualmente conocida como Universidad de Princeton), y terminó estudiando Leyes en el Transylvania Institute de Lexington, Kentucky.

En 1840 fue admitido a la Barra de Abogados (lo que le daba licencia legal para ejercer el Derecho).

Los demócratas del Sur y su candidato Breckinridge querían legalizar la esclavitud en esos Territorios para que cuando se fueran convirtiendo en Estados (cada Territorio se convertía en Estado cuando el Congreso de los Estados Unidos consideraba que reunía las condiciones necesarias para serlo) y por lo tanto comenzaran a mandar Senadores y Representantes al Congreso y a participar en las elecciones presidenciales; pudieran inclinar la balanza del poder político a favor de los esclavistas y así garantizar que la institución de la esclavitud no fuera eliminada jamás por los abolicionistas del Norte.

Los sureños estaban alarmados por el creciente poder de las fuerzas abolicionistas y su clase política estaba prácticamente paranoica, temiendo que el Norte usara la fuerza para eliminar la esclavitud.

Pero en el Norte, hasta los electores abolicionistas más moderados y aquellos que no eran abolicionistas y no les interesaba para nada el asunto de la esclavitud; se oponían radicalmente a que los futuros Estados del Oeste fueran esclavistas, ya que entonces el país sería controlado por la clase política del Sur.

Douglas y Bell se mostraban ambiguos en relación con el tema para no perder votos ni entre los electores del Norte ni entre los del Sur; mientras Lincoln y su equipo se oponían abiertamente a esa extensión de la esclavitud a los Territorios.

Breckinridge y sus partidarios alegaban que permitir la esclavitud en los Territorios facilitaría el proceso de poblarlos; pero su razón de fondo era el control político del país para conservar la esclavitud.

La campaña para la elección era tan anormal, que Lincoln no pudo inscribir su candidatura en 9 Estados del Sur debido al intenso odio que él y su partido despertaban entre los ciudadanos del Sur; así que en esos Estados ni siquiera figuraba en las boletas electorales (aunque de todas maneras casi nadie hubiera votado por él).

Pero a Breckinridge le afectaba una situación ligeramente parecida, pero a la inversa; aunque sí pudo inscribir su candidatura en casi todos los Estados del Norte (con la sola excepción de Nueva Jersey, Nueva York y Rhode Island, donde funcionaba una boleta de fusión electoral de Douglas, Bell y Breckinridge, otra particularidad extraña de esta elección), era evidente que en el Norte no iba a sacar casi votos debido a su entrega total a los intereses del Sur que lógicamente despertaba el rechazo de los votantes norteños.

Por su parte Bell estaba inscripto en los mismos Estados que Breckinridge y al igual que él participaba en la boleta de fusión parcial en Nueva Jersey, Nueva York y Rhode Island.

También apoyaban a Bell todos los sureños moderados que se oponían al programa radical de los demócratas sureños de Breckinridge; en cambio, en el Norte, Bell no tenía casi apoyo.

Y por último, Douglas, que era el único candidato inscripto en todo el país; no gozaba de mucho apoyo en los Estados del Sur (a excepción de algunas grandes ciudades sureñas).

El suicidio político de los demócratas era total: aunque Breckinridge le ganara a Bell en todos los Estados del Sur (algo muy difícil) de todas maneras no podía ganar la Presidencia por no poder contar con ningún Estado del Norte, y por su parte Douglas, aunque recorría todo el país, no podía ganar en el Sur y en el Norte corría peligro de ser aplastado por la avalancha republicana.

A nivel total nacional, Breckinridge obtuvo entre 848.019 y 848.356 votos populares (la pequeña diferencia depende de las diferentes fuentes citadas); que equivalían al 18,10% del total de los sufragios populares emitidos.

Toda la clase política de los Estados del Norte, tanto los demócratas como los republicanos, incluyendo al Presidente saliente Buchanan y al Presidente electo Lincoln, proclamaron que esto era un acto anticonstitucional y criminal.

La otra alternativa era lo contrario, anteponer sus convicciones e intereses personales a la lealtad a su Estado; y esto fue lo que hizo Breckinridge que rompió con Kentucky, su Estado, cuando éste decidió no separarse y permanecer dentro de la Unión federal estadounidense a pesar de ser un Estado esclavista y sureño.

Una vez instalado en el territorio rebelde, Breckinridge se incorporó al Ejército Confederado; es decir, al Ejército formado por los Estados rebeldes del Sur con la aportación de sus respectivas Milicias Estatales (la Milicia Estatal era el nombre con el que se conocía en aquella época a la Guardia Nacional) y con las unidades del Ejército regular federal (nacional) que se encontraban en el Sur y que se unieron a la Rebelión.

Aquel ataque había sido una orden directa del superior de Breckinridge, el General Braxton Bragg, un hombre con el que mantenía una terrible relación y al que odiaba profundamente (sentimiento correspondido, porque Bragg lo detestaba).

Breckinridge al principio se negó diciendo: "No lo haré", pero su oficial le replicó: "General, no tiene ninguna opción" y fue cuando Breckinridge les dijo a los 257 cadetes (que tenían entre 15 y 17 años de edad, aunque según algunos informes los había de hasta 12 años): "ataquen muchachos...y que Dios pueda perdonarme por la orden".

Es la única vez en la historia estadounidense que dos ex-rivales en una elección presidencial se han enfrentado en un campo de batalla.

En aquel momento había llegado del frente de guerra una información no confirmada de que Breckinridge había muerto en combate; algo que obviamente se demostraría falso o equivocado.

Por eso, Breckinridge y un pequeño grupo navegaron en una diminuta embarcación desde el Estado de la Florida hasta Cuba, que para ese momento era una Colonia de España; iniciando así su exilio político.

Algunos años más tarde, la clase política gobernante en Estados Unidos decidió finalmente que no era conveniente someter a juicio a los líderes de la derrotada Rebelión confederada; y se dictaron generosas leyes de Amnistía para perdonar sus delitos.

Aunque no regresó a la política, sí habló para criticar fuertemente al grupo terrorista racista Ku Klux Klan; a pesar de que este grupo era el heredero espiritual de la ideología esclavista que Breckinridge había defendido en el pasado, él se oponía a los métodos criminales con los que luchaban contra los negros afroamericanos y los blancos del Norte.

Afiche de campaña electoral del Partido Demócrata de 1856 con Breckinridge como candidato a vicepresidente al lado del candidato presidencial Buchanan.