John Bayard Britton

Se mudó a Fernandina Beach (Florida), donde trabajó como obstetra y partero.[1]​ Britton era ambivalente con respecto al aborto: por un lado se oponía personalmente al procedimiento, y a veces les sugería a las mujeres que venían para hacerse un aborto que meditaran bien en su decisión y volvieran en una semana.[5]​ Entre las fotografías que ilustran el artículo se muestra una en la que el Dr. Britton se pone el chaleco antibalas en el baño del aeropuerto, antes de salir hacia la clínica en Pensacola.[5]​ El Dr. Britton y el religioso Paul Hill también fueron entrevistados para el documental Lake of fire (‘lago de fuego’), del cineasta británico Tony Kaye, que sería publicado varios años más tarde, en 2006.El asesinato dio lugar a que varios miembros del Congreso pidieran al FBI que se infiltrara en grupos antiabortistas, como lo había hecho con el Ku Klux Klan.