Este período marcó el inicio de su destacada labor episcopal.
Carlo Chiarlo y co-consagrarón el Arzobispo de San José Mons.
[1] Durante su episcopado, desempeñó un papel importante en la dirección espiritual y pastoral de la comunidad católica en Limón.
Su liderazgo fue ejemplar, y su contribución al crecimiento y desarrollo de la Iglesia en Costa Rica fue significativa.
Su influencia es recordada no solo por sus contribuciones pastorales sino también por su compromiso con los principios cristianos de amor, compasión y servicio.