Jesús ben Ananías o Jesús hijo de Ananías (en hebreo: ישוע בן חנניה, Yeshúa ben Ḥananiá) es un personaje del Período del Segundo Templo, mencionado como profeta por historiador Flavio Josefo en Las guerras de los judíos, Libro VI, Capítulo 5.
Jesús ben Ananías continuó caminando por las calles de la ciudad día y noche, repitiendo la misma exclamación.
Sin embargo él continuó con sus gritos, ni siquiera respondió a quienes lo golpeaban y no pidió clemencia.
Albino llegó a la conclución de que Jesús ben Ananías estaba loco y lo dejó en libertad.
[2] Ambos profetizaron la destrucción del Templo, ambos fueron interrogados por autoridades judías antes de ser llevados ante el procurador.