Jenő Ländler (1875 – 1928) fue un líder comunista húngaro de ascendencia judía.
Su línea política fue derivando a la izquierda hasta unirse al comunismo.
Fue también comandante del Ejército Rojo Húngaro, que combatió contra las tropas extranjeras intervencionistas.
Después de la caída del régimen comunista en Hungría, emigró a Austria, donde continuó ejerciendo como líder del exiliado gobierno comunista húngaro.
Sus cenizas fueron devueltas a Moscú y enterradas en la Necrópolis de la Muralla del Kremlin.