Jean de Silhon

Argumenta que las necesidades políticas en las que opera el Estado permiten no seguir siempre las leyes normales de la ética, como decir la verdad.

[2]​ Su reflexión en torno al concepto de razón de Estado justificaba la política del cardenal Richelieu, quien, en el contexto de la Guerra de los Treinta Años no veía obstáculo en aliarse con los protestantes contra un enemigo católico ("un medio que la conciencia permite y los asuntos requieren").

Su puesto en la Academia fue ocupado por Jean Baptiste Colbert.

Su obra ha sido objeto de investigación por su influencia en Blaise Pascal.

[5]​ Dos de sus libros han sido reeditados recientemente.