Procedente de la extrema izquierda, se acercó al GRECE, el think tank de Nouvelle Droite, y fue autor de textos polémicos en los que fustigaba a la izquierda, la decadencia de Europa y ensalzaba el combate y las tradiciones europeas.
También fue libretista, siendo influido por la artista belga Regine.
Jean Cau era un entusiasta de la tauromaquia.
Escribió varios artículos y obras sobre este tema, mostrando su vinculación a los ritos ancestrales, paganos, de juego con el animal salvaje.
Se estableció en España para preparar varias novelas, entre ellas Les oreilles et la queue (Las orejas y el rabo).