Javier de la Rosa
Posteriormente pasó por el Banco Urquijo, antes de incorporarse al Banco Español de Crédito (Banesto), donde se ganó la confianza del presidente, Pablo Garnica Mansi, que en 1976 le nombró director general del Banco Garriga Nogués, filial de Banesto en Cataluña.[9][fuente cuestionable] De la Rosa estuvo condenado en tercer grado en el Centro Penitenciario Brians, Cataluña.Se le acusó por la descapitalización, estimada en 10.000 millones de pesetas.[8]Como tenía antecedentes penales (caso KIO / Torras), no pudo eximirse de entrar en prisión.[12] La absolución del caso Hacienda zanjó los pleitos pendientes que De la Rosa tenía con la justicia.[18] En la conversación Javier de la Rosa explicó como entidades bancarias, entre las que citaba a Banesto, Banco Central y KIO —aunque también a Ferrovial (ver Caso Palau), ACS, FCC, pagaban grandes sumas de dinero al partido político catalán Convergència, por entonces presidido por Jordi Pujol y cuyo tesorero era Miquel Roca, con el fin de que el partido intentara frenar el independentismo catalán.[18] También desvelaba que Jordi Pujol hacía pagos mensuales al político catalán del PP, Jorge Fernández Díaz, que en el momento de salir estas declaraciones a la luz era Ministro del Interior del Gobierno de España.[18] De la Rosa explicaba que la inhabilitación años atrás del juez Baltasar Garzón se debía realmente a que durante una de sus investigaciones se había topado por casualidad con una de las cuentas que utilizaba la trama descrita:Javier de la Rosa también cargaba contra el expresidente José María Aznar y el antiguo Ministro de Economía y Director del FMI, Rodrigo Rato, por ser quienes desviaban dinero a cuentas suizas procedentes de cuentas del banco Seguribank.