En 1846 tomó el hábito religioso en la Abadía cisterciense de Zwettl, Baja Austria, donde pronuncia sus votos en 1848.
Durante este tiempo recopiló su primera obra importante, Originum Cisterciensium Liber Primus (Viena, 1877), en la que describe la fundación de la Orden Cisterciense, su organización y extensión, y menciona a muchos de aquellos que, bajo diversos títulos, la habían profesado.
No llegó a publicar el segundo volumen, dedicado a conventos de monjas cistercienses, y para el cual había recopilado una gran cantidad de material.
Janauschek ayudó en la preparación de los tres primeros volúmenes, pero el cuarto, Bibliographia Bernardina (Viena, 1891), fue enteramente trabajo propio.
Los libros mencionados en Xenia Bernardina ascienden a un total de 2761 obras impresas y 119 manuscritos.