Se le considera normalmente como el mayor poeta polaco del período anterior al siglo XIX.
En 1575 se casa con Dorotea Podlodowska, con la cual tendría siete hijos, (uno solo varón, nacido luego de su muerte).
Es allí donde escribió sus trabajos más memorables, incluidos Despido de los Enviados Griegos (1578) (Odprawa poslów greckich) y Trenos (Treny) (1580).
Sus primeros poemas fueron escritos en latín, pero se tornó rápidamente hacia la lengua vernácula, creando formas poéticas que lo convertirían en el fundador de la literatura lírica polaca.
Fue la primera tragedia escrita en polaco y su estudio sobre las responsabilidades de la clase gobernante tiene resonancia hasta nuestros días.
El músico polaco Nicolás Gomólka (1535 – 1591), les pondría música en 1580, titulando la colección Melodías para el salterio polaco (Melodiae na psalterz polski), convirtiéndose este trabajo en un himnario que usarán católicos, protestantes y aún ortodoxos.