Hans Fugger consiguió mediante su propio esfuerzo y dos matrimonios muy provechosos, dejar a su familia un capital nada desdeñable a su muerte en 1408.
Su viuda, Elisabeth Fugger-Gfattermann, dirigió el taller de tejedores hasta su muerte, que acaeció en 1436.
Jakob tomó su parte y la llevó por su cuenta.
Jacobo Fúcar se casó el 13 de abril de 1441 con Barbara Bäsinger, hija del Münzmeister (acuñador), Franz Bäsinger.
Ulrich, Georg y, sobre todo, Jacobo Fúcar hijo enriquecieron a la empresa familiar.