Jacob van Schuppen

Nacido en Fontainebleau, era hijo del pintor-grabador Pieter van Schuppen.

Desde pronta edad comenzó a pintar como discípulo de su padre y con su tío Nicolás de Largillière.

[2]​ Jacob van Schuppen se dedicó principalmente a realizar retratos, gracias a los que adquirió suficiente reputación como para recibir una oferta en 1719 del Duque de Lorena que lo declaró su primer artista.

Tras residir varios años en Lunéville se trasladó a Viena en 1723 gracias a la mediación del Conde de Altan[3]​ quien consiguió convertirle en pintor de la corte, realizando varios retratos de Carlos VI del Sacro Imperio Romano Germánico.

El 20 de enero de 1725 se convirtió en Primer Pintor y director de la Academia de Bellas Artes de Viena a la que hizo florecer siguiendo el modelo impuesto por la Real Academia de Pintura y Escultura.