Sirvió durante tres años en dicho frente contra los turcos, participando en operaciones alrededor de Erzurum y Kars.
Después de que los bolcheviques tomaron el poder, se involucró activamente en la política local y regional.
[2] En octubre de 1919, se unió como voluntario en el Ejército Rojo en el combatió en la guerra civil rusa.
Luego combatió en el Frente Occidental, luchando en defensa de Petrogrado contra las fuerzas antibolcheviques del Ejército Blanco, y luego contra las fuerzas polacas cerca de Pólatsk y Lépiel en la Guerra polaco-soviética.
Este grupo capturó las ciudades de Novogrúdok, Slonim, Vawkavysk, Grodno, Białystok y Baránavichi.
Ambos hombres vieron indicios claros del inminente ataque, pero sus advertencias al Alto Mando fueron ignoradas.
[6] Detuvo un camión atestado de soldados y les dijo que lo llevaran al cuartel general del 10.º Ejército (comandante Konstantín Golubev) en Bialystok.
Allí se enteró por Golubev que sus camiones y tanques carecían de gasolina porque varios ataques aéreos habían destruido sus depósitos de combustible, la munición prometida no había llegado, sus tanques eran máquinas viejas «que solo valían para cazar gorriones» el movimiento de tropas era imposible debido al total control del aire que tenía la Luftwaffe.
«Mis hombres están luchando como héroes», dijo Golubev, «¿pero qué pueden hacer contra tanques o aviones?».
[8] Su siguiente puesto fue en el reconstituido Frente Oeste, como adjunto del coronel general Iván Kónev.
El comandante anterior, el mayor general Arkadi Yermakov,[10] había sido arrestado por incumplimiento del deber como resultado de sus acciones cuando el ejército fue parcialmente rodeado en Briansk.
El día 18, Boldin lanzó un grupo móvil del ejército a la batalla, que rompió las debilitadas defensas alemanas y liberó la ciudad de Kaluga.
[13] A medida que el Ejército se debilitaba por el desgaste y las fuerzas alemanas recuperaban el equilibrio, Boldin mostró su frustración en numerosas ocasiones.
Las tropas del Mijaíl Efremov recibieron algunos refuerzos aerotransportados y envíos de suministros por vía aérea pero claramente insuficientes para resistir.
[17] En octubre de 1943, el 50.º Ejército fue transferido al Frente Bielorruso y Boldin quedó bajo el mando del general Konstantín Rokossovski.
Este lo mantuvo en papeles limitados hasta que, en abril de 1944, su ejército fue transferido al Segundo Frente Bielorruso del comandante Iván Petrov.
Después, el 50.º Ejército de Boldin continuó avanzando en la retaguardia del avance acorazado soviético, destruyendo las fuerzas alemanas dejadas atrás por los tanques soviéticos, en dirección a Grodno en las cercanías del río Neman y la frontera con Polonia, donde detuvo su avance.
[18] Posteriormente, en noviembre, Rokossovski fue trasladado al Segundo Frente Bielorruso, y nuevamente Boldin estuvo bajo su mando.
Todos menos una pequeña retaguardia de las tropas alemanas se escabulleron para evitar luchar contra las fuerzas principales del Frente y pasaron 48 horas antes de que Boldin se diera cuenta, mientras informaba que la fuerza completa enemiga todavía estaba en su lugar.
Rokossovski había visto suficiente, y en febrero, justo cuando el ejército fue transferido al Tercer Frente Bielorruso, Boldin fue relevado del mando, y su jefe de Estado Mayor, el teniente general Fiódor Ozerov, asumió el mando por un tiempo.