Tanto la isla de Mar como la de Tierra se encuentran deshabitadas y no tienen ninguna edificación.
La isla de Mar no supera los cuatro metros de altura sobre el nivel del mar.
Está a unos cincuenta metros de las playas marroquíes.
La isla de Mar se llegó a utilizar como cementerio.
Ambas islas están situadas a pocos metros de la playa de Sfiha, y gozan de gran reputación entre los veraneantes como trampolín y zona de juegos.