Su nombre y su burdel, Elizabeth's Dancing Club, se convirtieron en parte del folclore puertorriqueño tanto durante su vida como póstumamente.
[2] Otra versión dice que salió y se casó con un hombre mucho mayor, un estadounidense rico.
Su romance, sin embargo, terminaría abruptamente cuando Isabel, caminando por el centro con su prima Norma, reconoció a su novio adinerado paseando en una caravana nupcial tras casarse con otra chica de la clase alta de Ponce, sin previo aviso.
Sus burdeles supuestamente fueron visitado por políticos, empresarios y clérigos, aunque esto permanece sin confirmar.
[2] Algunas fuentes afirman que, si bien sus negocios de burdeles la hicieron bastante rica, la Iglesia Católica no aceptó sus donaciones debido a su pasado y la naturaleza de su profesión;[2] pero otros afirman que ella hizo muchas contribuciones significativas y bien recibidas a la Iglesia Católica en Ponce.
[6][7][8] En 1979, se estrenó una película sobre su vida, protagonizada por Míriam Colón como Isabel, con José Ferrer, Raúl Julia, Miguel Ángel Suárez y Henry Darrow.