Después de graduarse escribió para el New York Times y el Chicago Tribune.
Vivió en San José, California donde presa de depresión se suicidó.
A su regreso a China, Tsien desarrolló el programa de misiles Dongfeng, y más tarde el misil del gusano de seda, que sería utilizado por los militares iraquíes durante su guerra contra Irán e irónicamente contra las coaliciones lideradas por Estados Unidos durante la Primera y la Segunda Guerra del Golfo.
Documenta atrocidades cometidas contra China por las fuerzas del Ejército Imperial Japonés durante la Segunda Guerra Sino-Japonesa, e incluye entrevistas con víctimas.
Este libro permaneció en la lista de Best seller del New York Times durante 10 semanas.