Das (2016) sostiene que, durante las guerras revolucionarias y las napoleónicas, las islas francesas en el océano Índico fueron un «centro de vigorosa oposición a los británicos en la India y un foco de productivo comercio».
[6] Los soldados desembarcaron en la playa sin ser notados, para luego avanzar y capturar las defensas y a la fragata francesa Caroline;[8] el comandante francés, Nicolas Des Bruslys, se suicidó luego del ataque británico.
Por su parte, en ese momento la guarnición francesa en Isla Bonaparte estaba conformada por 576 soldados y 2717 milicianos.
En Rivière des Pluies, cuatro personas murieron ahogadas durante el desembarco de 150 soldados y unos marineros del Nereide por el fuerte oleaje;[1][9] para hacer frente a las condiciones, el teniente coronel Henry Keating ordenó emplear al bergantín Ulney como rompeolas que, sin embargo, únicamente protegió a unos cuantos botes, por lo que el desembarco completo no se logró en el resto del día.
Tal fin de las hostilidades se pactó a las 18:00 horas y, con ello, la Isla Bonaparte pasó a manos británicas; en ese bando hubo veintidós muertos y 79 heridos.
[4] Según Mikaberidze (2020), esta fue una «significativa victoria británica porque [Borbón] proveyó ancladeros seguros para la Marina Real y le permitió a los británicos concentrar sus operaciones contra la única isla francesa restante en el océano Índico, la [Isla de Francia]».