El bajista Carlos Dengler abandonó la banda poco después de la finalización del álbum.
La banda había anunciado que estaba escribiendo nuevas canciones en marzo de ese mismo año.
[cita requerida] Este álbum homónimo se anunció como una vuelta al sonido de sus comienzos.
[1] Chris Coplan de Consequence of Sound elogió la "rica narrativa" y "la brillante estimulación existente en toda la grabación" y lo describió como "una historia que se construye a partir de un emocionalmente resistente semi-alegría al principio [...] pasando a un espeluznante, taciturno y siniestro final".
[9] Greg Kot, del Chicago Tribune describió al álbum como "pedazos de música prometedora sin bases sólidas" y afirmó que aunque "la banda suene fantástica", el álbum no ofrece "más de una o dos canciones verdaderamente memorables".