Inmunoglobulina contra la rabia

Se administra mediante inyección en el sitio de la herida y en un músculo.

No es necesaria en personas que hayan sido vacunadas previamente contra la rabia.

Una vez que el virus ha ingresado al sistema nervioso central, la inmunoglobulina contra la rabia ya no es útil.

[6]​ La inmunoglobulina contra la rabia es costosa y difícil de conseguir en el mundo en desarrollo.

[8]​ La versión equina es menos costosa pero tiene una mayor tasa de efectos secundarios.