Influencia de la prensa de Lima en la opinión pública del Perú

[22]​ Sin embargo, el sesgo editorial se presenta con notoriedad en la televisión comercial,[a]​ en que algunos canales recibieron dinero del Fujimorato.

Adicionalmente, la crítica incluye el enfoque centralista en las noticias,[45]​[46]​[47]​[48]​ con medios como la televisión y los periódicos que muestran una marcada falta de interés en visibilizar la población indígena.

[57]​ Por otro lado, los medios locales, particularmente aquellos que operan en áreas rurales, han demostrado una fuerte dependencia del gobierno en materia de comunicaciones regionales.

[68]​ Así fue el caso de La Abeja Republicana, que contó a sus colaboradores Francisco Javier Mariátegui y José Fasuto Sánchez Carrión.

[82]​ Este medio obtuvo vínculos con la Universidad Nacional Mayor de San Marcos con el apoyo deportivo que tuvieron en común.

[87]​ Para 1968 los empresarios Miró Quesada, Beltrán Espantoso, Manuel Ulloa, Banchero Rossi y los Prados tuvieron mayor protagonismo en los diez periódicos más influyentes de la época, según la revista argentina Crisis.

[92]​ Aunque contó con su propio medio, La Tribuna, la situación se tensó aún más cuando sus simpatizantes lograron asesinar a su director Antonio Miró Quesada de la Guerra en 1935.

Panamericana y Caretas también lo hicieron cuando contrataron a la empresa Índices U, aunque no contó con alguien que interpretara seriamente los resultados.

En los primeros años, Expreso ya se había inclinado hacia los oficialistas,[89]​ contaba con un grupo de intelectuales e incluso compartía material educativo con la población.

[108]​ En 1974, El Comercio, que siguió teniendo representación burguesa (según la revista argentina Crisis),[88]​ compartía con otros medios bajo tendencias conservadoras como Última Hora y Correo.

[6]​ El diario decano recurrió a la empresa CPI para entender la situación real del gobierno y vaticinó que en 1978 se presenció la ausencia electoral para futuros comicios.

[136]​ El entonces presidente Alan García pidió a los periodistas en 1987 para que moderaran su cobertura de los atentados terroristas perpetrados por organizaciones extremistas.

[138]​[139]​ Para 1996, según un estudio de la Universidad ESAN, El Comercio se posicionó comercialmente como «medio serio» por sus avisos clasificados y suplementos especializados.

[149]​ Fujimori ganó fama por su neopopulismo, relacionado con la población de clase alta, y su reflejo en la televisión como medio instalado en dicho sector.

[179]​ Existen otros medios como Gestión y Caretas que también evitaron a la «influencia perversa», según el especialista en asuntos de poder Francisco Durand.

[197]​ En un texto judicial obtenido por la AFP, Vladimiro Montesinos reconoció al empresario Genaro Delgado Parker que César Hildebrandt, cuando tenía su espacio en el canal Global y su seminario Liberación,[e]​ era «la oposición izquierdista que él no podía avalar y su mensaje [a la opinión pública] era nocivo, tanto más si se estaba en una campaña electoral».

[251]​ No obstante, el diario La República señaló que la radio fue un elemento importante para las regiones debido a su capacidad de realizar denuncias.

[301]​ Ante la presión oficialista en los medios, según Perú 21, el blog Pepitas.com ganó notoriedad por mostrar información contra la administración de García, al igual que nuevos portales web.

[340]​ Mario Vargas Llosa, quien también lamentó la escasez de entrevistas en los medios televisivos mencionados,[341]​ propuso crear un espacio propio para contrastar la realidad electoral junto a Gustavo Gorriti que no se concretó.

En Internet, surgieron otros portales de opinión como El Montonero, La Abeja[p]​ y Lucidez; enfocados en la apreciación del fujimorismo en la política.

[383]​ En cambio, cuando ocurrió aquel indulto a Alberto Fujimori, Canal N fue el único en continuar con la cobertura hasta vísperas de Navidad.

[393]​ El caso Odebrecht ha tenido un profundo impacto en la relación entre los intereses corporativos y la sociedad peruana, tanto antes como después de su revelación pública.

Además, usó parte del dinero para la torta publicitaria en los medios Exitosa, ATV, RPP, Latina, Panamericana, América y Willax.

En esta línea, el dominical Cuarto poder (bajo la breve etapa de Christian Sotomayor, productor del programa) ofreció un póster donde apareció Pedro Castillo, Iósif Stalin y Mao Tse Tung.

[470]​ Willax TV, por su parte, ha continuado demostrando su apoyo al excandidato presidencial de derecha Rafael López Aliaga, a quien ha mostrado en un estado aparentemente agresivo hacia Castillo.

[486]​ Tras la solidaridad de otros gobiernos al destituido, que conllevó un conflicto diplomático, también redactó un nuevo comentario bajo el nombre «La mala vecindad».

El congresista Javier Diez Canseco adujo que esta operación otorgó a José Enrique Crousillat control sobre la información del canal.

[574]​ Las acusaciones de parcialidad política se hicieron evidentes en otros programas como Hora 20 conducido por Umberto Jara, quien reconoció su hostilidad hacia Toledo.

Este nuevo programa dominical estuvo bajo la producción interina de Mauricio Aguirre, quien reorientó en sus primeros años su enfoque hacia cuestiones sociales más que políticas.

[621]​ Los orígenes de la manipulación mediática se remontan a los representantes del fujimorismo, como Saúl Mankevish, Ricardo Winitsky y Daniel Borobio.

El edificio del diario limeño El Comercio , uno de los más influyentes en la prensa escrita del país. Este medio recibió acusaciones de falta de pluralidad en sus coberturas debido a su defensa de lo empresarial. [ 10 ] [ 11 ]
Una portada del diario Expreso , c . 2006 .
Un cartel que acusa a la prensa de distorsionar los hechos de la policía, en referencia a las muertes de dos manifestantes durante las protestas de 2020 .
El diario Correo publicó en noviembre de 2023 una portada en la que informaba sobre una presunta organización delictiva en el Ministerio Público . La noticia también incluía una denuncia contra la presidenta Dina Boluarte .