El programa iconográfico no fue planeado con minuciosidad pero igual se pueden distinguir los lugares reservados previamente a una figura.
[1] Hay noventa y seis representaciones marianas en el templo que describen en forma casi exhaustiva la vida de la Virgen.
[1] San Esteban, patrono de la catedral, está representado como diácono teniendo en la mano derecha una palma de la victoria y en el brazo izquierdo tiene unas piedras que oprime contra su pecho.
[2] Una figura representa a la Virgen misericordiosa en donde los estados buscan refugio bajo su manto.
En esta figura los brazos del Crucificado son desproporcionadamente grandes, sobresalen el baldaquín y parecen abrazar a los fieles.