El nuevo escenario ya acogió un partido de la selección española, que acababa de ganar su primer mundial.La temporada siguiente el Igualada consiguió su primer ascenso y se clasificó para jugar en la Segunda División Preferente.
La ciudad vivía intensamente el deporte y se sucedían las visitas de equipos grandes para jugar amistosos.
La progresión del club seguía creciendo y no tardó en llegar un nuevo éxito, ya que el equipo se proclamó subcampeón de España de Primera División en Salt, por detrás del Español, que se llevó el triunfo final.
La década de los setenta fue especialmente dura para el Igualada, que la temporada 1972-73 descendió a Primera División tras perder otra promoción.
El equipo sufrió un nuevo descenso y la entidad tenía un futuro muy negro, que amenazaba su continuidad, precisamente coincidiendo con sus 25 años de historia.
Esa decisión fue clave en el futuro del Igualada, que ese año finalizó la liga en undécima posición.
Entre las novedades estaba el traslado a la pista de las Escuelas Pias, que se convirtió en el primer pabellón cubierto del hockey igualadino.
El año siguiente no hubo promoción, pero si sufrimiento hasta la última jornada, en la que una inolvidable victoria en Cerdanyola aseguró la permanencia.