Históricamente hay referencias a esta iglesia parroquial desde el siglo XI, pues aparece mencionada en un documento de donación del año 1071.Así, cuando este se modernizó entre los siglos XIX y XX debido a los ingresos obtenidos por los navegantes la iglesia hizo lo propio, transformándose la anteiglesia.[3] En el interior del templo se rinde culto a una reliquia de San Pedro Apóstol.En su reconstrucción, iniciada en el primer tercio del siglo XVI, se planteó como un edificio de planta gótica tardía.[4] Las obras se prolongaron durante todo el siglo, concluyendo en una fachada oeste con portada renacentista y capiteles jónicos.