Iglesia de San Pedro Apóstol (Sabiñán)

tiene un origen mudéjar del que sólo se conserva su torre y por necesidades de la población se erigió la actual en la segunda mitad del siglo XVII a cargo de Juan Segura.

En el siglo XVIII se abrió la capilla del Rosario, debida a la familia Martínez.

El retablo de la Virgen del Pilar pertenecía al Capítulo, que muestra su escudo y que se adoptó como escudo municipal.

La capilla de Santa Ana se debe a la familia Muñoz de Pamplona-Funes, y es hoy museo parroquial.

En esta iglesia se venera una astilla del Lignum Crucis (Cruz de Cristo).