Fue ampliada y reestructurada por su descendiente el Conde de Orgaz, Juan Hurtado de Mendoza Guzmán y Rojas (Antoniana (Álava), 1536 – Santa Olalla, 1606) casado con Leonor Carrillo de Figueroa.
La decoración es principalmente barroca del XVII, e intervinieron en ella importantes artistas como Luis Tristán, Juan Carreño de Miranda, José Martínez Colmenero, Juán Gómez Lobo y Toribio González.
En la iglesia de San Julián se conservan nueve retablos con un importante valor artístico.
Destaca especialmente el retablo mayor pre-churrigueresco cuyo autor principal es Juan Gómez Lobo.
Está dedicado al titular del templo por lo que se le denomina retablo mayor de San Julián, pero que al estar en él representados tres San Julián distintos, es conocido popularmente como el retablo de los “San Julianes”.