En el lugar donde hoy está erguido el templo ya había una capilla consagrada a nuestra Señora del Amparo y de la Buena Muerte construida por la Hermandad de mismo nombre.
En 1715, la hermandad solicitó al obispado el permiso para edificación de un nuevo templo dedicado a San Gonzalo Garcia.
Sin embargo ,según fuentes secundarias, aunque haya habido una tentativa de mantenimiento del estilo barroco por medio de las curvas y contracurvas en la arquitectura, no es posible afirmar con exactitud que pertenezca a tal estilo, posiblemente está más para el siglo XIX.
Son las más preciosas y bellas imágenes sacras existentes en el estado.
[2] La iglesia vivió su periodo áureo en el siglo XX, pues sirvió como sede parroquial y ejerció las funciones de Matriz y Catedral de Vitória.