El antiguo líder de la secta John Ortell Kingston, vivió en una pequeña casa en Salt Lake City hasta 1987.
Actualmente, el grupo afirma que, aunque diferentes habilidades aportan diferentes resultados financieros, no hay personas sin hogar dentro de la iglesia y existen programas internos para quienes experimentan pobreza financiera.
La secta se formó en los estados de Arizona y Utah, durante el periodo conocido como la Gran Depresión.
Durante el periodo de la gran depresión, el desempleo y la pobreza eran elevados, mientras que el apoyo gubernamental faltaba o era muy escaso.
Al principio se unieron a la secta personas de otras denominaciones religiosas.
El objetivo inicial era obtener beneficios financieros con el trabajo conjunto, independientemente de la afiliación religiosa y las convicciones personales.
Los principios básicos eran vivir según la Regla de oro y servir a los demás.
Investigadores independientes de la Universidad de Santa Clara en California han atribuido determinadas enfermedades genéticas a las uniones entre familiares cercanos dentro del grupo, a la endogamia y al pequeño tamaño del grupo.
Según algunas estimaciones, los activos del grupo ascendían a 300 millones de dólares estadounidenses.