Es uno de los muchos que se encuentran en el archivo y que registran rituales de los pueblos súbditos y vecinos del imperio.
En el momento en que se anunció su descubrimiento, el texto en sí no había sido descifrado.
[4] Se cree que podría haber sido hablado por los habitantes de Kalašma ya que se refieren a este idioma como la lengua de la tierra de Kalašma, una región situada en el extremo noroccidental del territorio hitita, en las proximidades de las actuales Bolu o Gerede.
[4] Además, Según Rieken, a pesar de su proximidad geográfica a la zona donde se hablaba el idioma palaico, el texto parece compartir más rasgos con el luvita.
[5] Este idioma fue un hallazgo resultado de las campañas arqueológicas anuales dirigidas por el actual director del yacimiento el profesor Andreas Schachner, del Departamento de Estambul del Instituto Arqueológico Alemán.