Husayn de Zaragoza (en árabe: حسين بن يحي الانصاري Ḥusayn ibn Yaḥyà al-Anṣārī o الحسين بن يحي الانصاري Al-Ḥusayn ibn Yaḥyà al-Anṣārī) era valí de esa ciudad en 777 y todavía la gobernaba en 781.
Carlomagno sitió la ciudad sin éxito y al cabo de un mes se retiró, y en el verano su ejército sufrió una grave derrota en la batalla de Roncesvalles.
Husayn se mantuvo rebelde hasta el año 781 cuando el emir de Córdoba atacó la ciudad[1] con un ejército poderoso comandado por Thalaba ibn Ubayd-Al·lah al-Judhamí,[2] y lo obligó a someterse.
A cambio de la lealtad, Husayn conservó el cargo.
Su hijo, Said bin Husayn, fue entregado al emir como rehén.